#1 —Nunca había acariciado un puercoespín. —¿A qué viene eso? Tampoco lo estás haciendo ahora —respondió con cierto tono de incomodidad. —Ya, ya lo sé —dijo cambiando el peso de una pierna a otra y enredando sus manos en un gesto de nerviosismo juguetón—. ¿Acaso…
Hace ya bastante tiempo que tengo absolutamente claro lo mucho que vale una sonrisa. Y no me refiero al bucólico significado de las sonrisas en los anuncios que pretenden convertir una marca o producto en sinónimo de felicidad. Me refiero a la sonrisa como respuesta…