
Se dice que, en este lugar, colocar una piedra sobre cualquiera de los montículos te traerá buena suerte.
Hay veces que llegas a lugares en los que puedes leer la esencia que perdura de la gente que ha pasado allí. Llego y pienso ¿cuántas personas habrán llegado a dejar su piedra esperando que la buena suerte llegue? Probablemente no conozca a ninguna de ellas, pero mediante un método supesticioso han creado un paisaje como éste. Es llamativo, pensar en las cosas que llega a hacer la gente para que su recuerdo perdure y luego un simple gesto que puede pasar desapercibido puede ser uno de nuestros legados.
Esta clase de repercusiones de nuestros actos, capaces de inspirar a otros y sin saberlo. Esa capacidad que tenemos de crear sentimientos en otros aún sin quererlo, o bien de sacar alguna emoción de cualquier cosa… es una maravilla
Y a ti, ¿qué te hace sonreír?