Retomando el hilito de la semana pasada, hoy me toca centrarme un poco más en lo que supone la educación de unos cuantos niños (hasta donde sé llegó a tener más de 100) que nunca han recibido educación. ¿Cómo consigues motivar a niños que ni siquiera están «obligados» a ir a la escuela y que no han ido en su vida?

Supongo que habrá expertos en la materia y conocerán los mejores métodos, pero para Séptimo, que hasta entonces sólo había estudiado Medicina (que yo sepa), era la primera vez que se enfrentaba a esa situación. Empezó a dar clase con unos pocos niños, muy pocos para todos los que había. Las clases marchaban bien, aunque hubiese pocos niños, hasta que decidió dar, por las tardes, clases de un arte marcial que llevaba practicando ya muchos años (creo recordar que era Taekwondo). Esto fue el desencadenante de que muchos niños se acercasen a preguntarle si podían recibir clases de Taekwondo. Al fin y al cabo, una actividad que ya de por sí tiende a llamar la atención, en una región tan pobre y con tan poca seguridad, era un aliciente bastante importante. «Claro que podéis apuntaros a Taekwondo, si venís a las clases de la escuela.» La segunda semana tenía 37 alumnos. Cuando se fue, la escuela tenía más de cien alumnos.

Me parece algo impresionante, que una vez contado parece de lo más simple, pero hay que saber dónde buscar el interés de los demás para despertarles el interés por algo que, en principio, no les llama la atención. Como poco, me da que pensar cómo habría yo actuado en esa situación. Y es que si hay motivación personal no es tan difícil que se convierta en ajena.

Ahora que se ha venido a realizar medicina de familia en España, el colegio sigue en marcha, intentando establecerse como una asociación y buscando la manera de distribuir recursos sin tener que depender de temas económicos para evitar que el dinero se vaya quedando por el camino. Ésa es la motivación.

Aún me queda algún que otro detalle que desgranar de la historia, que dejaré para el hilo de la semana que viene (Al fin y al cabo, la idea de los hilos consiste en sacar de la maraña ideas, conceptos y reflexiones únicas y simples).

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